miércoles, 26 de septiembre de 2012

historia deun perro herido (anonimo)

Ayuda al mejor amigo del hombre, 2a 2692012. 

En internet hemos encontrado un relato que nos hará reflexionar.
Actividades
a) Coloca los signos de puntuación en el lugar adecuado.
b) Extrae las palabras desconocidas y anótalas en tu cuaderno, buscando su significado, con la ayuda del DRAE.
c) Sintetiza, en tu cuaderno, el relato que has leído.
La rueda de un carruaje hirió la pata de un hermoso perro de San Bernardo.  Iba éste hacia su casa cojo y dolorido y al verlo pasar un herrero le dió lástima.

  Lo llamó le lavó la herida, puso en ella unas gotas de bálsamo y la vendó cuidadosamente. El perro siguió haciendo visitas diarias al herrero, éste lo siguió curando y al cabo de una semana el perro estaba curado por completo.
  No se olvidó por eso de su bienhechor a cuyo taller, acudía con frecuencia para mostrarle su agradecimiento.
  Habían pasado algunos meses, cuando una mañana encontró el herrero en la puerta de la herrería dos perros.  Uno de ellos era su antiguo amigo, el de San Bernardo y el otro un galgo que tenía la pata herida y llena de sangre.
  El herrero quedó asombrado de aquel rasgo de inteligencia y de nobleza de sentimientos en un animal y se puso a curar al galgo El de San Bernardo hizo entonces grandes demostraciones de agradecimiento y de cariño mientras el herrero llorando de gozo le decía:
  Hiciste bien, y te lo agradezco. Sabías que podías contar con tu antiguo amigo y no sólo has favorecido a este perro, sino que me has dado una mañana feliz   anónimo

lunes, 13 de agosto de 2012

literatura,cuentos

Desamparado
©José O. Alvarez
Un movimiento leve de cabeza acompañado de cómplice mirada le basta a los perros del paraíso para interpretar los deseos del amo.

—Espero que hagan lo hay que hacer —piensa el magnate.

Un ingenuo desconcertado susurra preguntando a uno de los extasiados súbditos quién es esa dignidad cuya presencia impone el orden.

—¿No lo sabe?

—No

Si todo el mundo lo debería saber, para qué perder el tiempo contestando estupideces. Es uno de los pocos privilegiados poseedores de la mitad de la riqueza planetaria que ha consolidado sus empresas. Los amparados bajo su alero lo reciben con veneración y gratitud que expresan con venias y sonrisas serviles mientras baja majestuoso de la limosina a participar de mala gana en el congreso sobre la creciente problemática de los marginados.

En vista que es el primero en salir enmascarado con pañuelos exclusivos Christian Dior, se tapan las narices con Oscar de la Renta. Ni los perfumes, ni los pañuelos perfumados logran neutralizar el olor de los desamparados que pululan por las calles. Es un olor de animal muerto abandonado, enclaustrado y de pronto sacado a la intemperie, algo que se queda grabado no sólo en el olfato sino en la memoria y produce náusea el recordarlo.

Entre tinieblas y luces mortecinas de la calle confundido en cartones, periódicos, botellas y jeringas cerca de allí emerge un bulto de humanoide apariencia. Sus ojos compiten con el sol que se derrama por el techo de los edificios. Son destellos producidos por las lágrimas que forman cauces salitrosos que se confunden con la nieve que cae de su cabeza. No se sabe el color de la cara ni de su piel. Los labios reventados por el frío de las noches le sangran y están llenos de cicatrices. Lo que parece ser una sonrisa es una mueca amarga de fiera en acecho que le deja entrever unos dientes amarillos tocados de verde en las encías. Levanta los brazos como si quisiera abrazar el mundo semejando el Mesías prometido que se le cuelga al sol recién nacido.

—Es un Cristo.

—Un Cristo de espaldas—, replica mentalmente una mendiga adivinando el pensamiento de la beata que abandona la iglesia.

El gesto mascullador que la última toma por plegaria unido a la aparición, conmueve los cimientos de su corazón. Al dar limosna la bondadosa mujer espera el consabido "Dios se lo pague" que ayudará a acrecentar su riqueza celeste.

—Dios se lo pague—. La beata no escucha porque el viento arrastra las palabras junto con periódicos de enormes titulares anunciando la llegada a la ciudad del redentor.

—¿Desagradecidos! ¡Deberían barrerlos a todos!

Se lo habían repetido una y mil veces los de la congregación: "Dar limosna es alimentar la pobreza". Creyente de apariciones trata de acercarse al Cristo que se despereza. Un sudor recorre sus entrañas. Expoleada por el olor, alcanza a ver que la corona de espinas de ese Cristo imaginado no es de espinas.

El cabello y la barba se entrelazan formando un nudo irrompible que en gajos se esparcen como corona cristera. Sus manos ásperas tatuadas de barro y aceite semejan dos aspas carcomidas por el óxido marino. Lo que fueron alguna vez uñas se han convertido en garras de oso siberiano revolcado en el fango. Chaqueta, pantalones y zapatos son hilachas que cuelgan formando una coraza que lo mantiene en soledad que arrastra como su pierna que parece no formara parte de su cuerpo. Su apariencia le quita las ganas de evolucionar a la materia inanimada. A su paso las flores y las plantas se doblegan inermes. Habla con una subterránea voz que se enfrenta a otros sonidos guturales en una pelea que nunca termina y que deja escapar de vez en cuando un dejo de melancolía.

Por el sutil tono de dulzura de ese dejo se entrevé que hubo un tiempo feliz antes de que sus sueños fueran privatizados. En las noches de luna llena su alarido hace estremecer la ciudad cuya escarcha apozada en sus muros cae en pedazos cual Jericó vulnerada. Las ratas huyen despavoridas a esconderse en las vitrinas Versaci donde ve reflejada su forma deforme de poeta de la urbe. Allí es donde menos peligro corren. Filogenéticamente saben que en los muladares unas garras asesinas las diezman implacables.

Ese ser que es pesadilla hasta para la escoria que se apila en escaleras catedralicias, maldice a los cielos mientras deletrea un graffiti lapidario que ha visto reproducido en los muros de la urbe contaminada:

¡Combata la pobreza: mate un mendigo! 

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miércoles, 25 de julio de 2012

ficha de rugor el dragon enamorado



FICHA DE LA OBRA LITERARIA: . . . rugor el dragon enamorado . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Estudiante:williams denios
Autor: . . . . . . . . . . . . . . . . .                                                        Puntaje: . . .  puntos  3
Bimestre: .2º A . . . . . . .

II. DEL AUTOR  
Breve biografía del autor:
Fecha de nacimiento, lugar:
Fecha de fallecimiento, lugar:
Profesión u oficio que tuvo:

III. DE LA OBRA
Título:  rugor el dragon enamorado

Subtítulo
Género: narratibo
. . . . . . .
Narrador:
Personajes principales: dragon y la prinsesa
Personajes secundarios:  el rey
Lugar o lugares:  la selva
Tiempo: españoles
Argumento:

IV. VERIFICACIÓN  
Citas textuales que te hayan llamado la atención (seis como mínimo, indicando la editorial, año de edición, página…)


V. VALORACIÓN
Reflexión personal sobre la obra
             Que la conosio  cuando daba un paseo por el bosque o bolaba
Y se enamoro   de la prinsesa y desde ese dia no dejo de pensar en ella
 Y un dia cuando  bolava  por el bosque  y le mordio un lobo por la cola
 Y se fue a su casa derramando sangre  hasta su casa  pero un dia el rey  manda a matar al dragon y no lo mato al dragon pero luego el dragon  fue al castillo , al cuarto de la prinsesa y mientras bolaba lo mataron y la prinsesa lloro y lloro

VI. GRAFICA
Elabora un dibujo con una escena que te haya llamado la atención (en el cuaderno).

como hacer un resumen



fuente :http://www.youtube.com/watch?v=gzFQ9f5Bdmg&feature=relmfu

lunes, 25 de junio de 2012


Denominamos géneros literarios a los grupos en los cuales podemos englobar una obra literaria concreta. Desde una óptica de retórica clásica las obras literarias se pueden clasificar de la siguiente manera: obras líricas, obras épicas y obras dramáticas. La lírica habitualmente tiene que ver con la sensibilidad y la estética, la épica normalmente narra los hechos acaecidos a héroes o también a antihéroes y por último las obras dramáticas son aquellas que tiene por fin que el libreto sea representado encima de un escenario.

Aunque casi todas las obras literarias se pueden clasificar dentro de los tres grandes géneros citados en el párrafo anterior hay que tener en cuenta que toda obra literaria se gesta en un determinado periodo histórico al cual se encuentra indisolublemente unido lo cual puede provocar que la obra no se adscriba a pies juntillas a un determinado género literario.

Los subgéneros literarios líricos son la oda, la elegía, la égloga, la sátira y la canción. Los subgéneros literarios épicos son la epopeya, el poema épico y el romance. Los subgéneros literarios dentro de la prosa nos encontramos con el cuento y la novela. Por último dentro de los subgéneros literarios dramáticos están la tragedia, la comedia, el drama, la ópera y la zarzuela.

Podríamos decir, como ya hemos apuntado anteriormente que al gestarse y publicarse la obra dentro de un contexto histórico determinado esto provoca que el género literario que ampara a la obra se esté desarrollando con unas determinadas variaciones que han influido al autor a la hora de pergeñar el texto literario. Cuando muchos autores caen bajo la influencia de una manera de tratar un género literario en un tiempo determinado, esto hace que nazca el subgénero literario.

fot de rugor el dragon enamorado